Candidatos desempolvan viejas soluciones a caos vial
El congestionamiento vial no solo le quita las ganas de vivir a cualquiera que deba padecerlo a diario, también le pasa una alta factura al país en términos de competitividad.
El problema tiene su manifestación más exasperante en la Gran Área Metropolitana (GAM). Esta pequeña porción del territorio concentra al 52% de la población, según el censo del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC) en el 2011. A la concentración de habitantes, añada la mala planificación y nulos incentivos que tienen los ciudadanos para privilegiar el uso del transporte público y obtiene la receta del caos vial.
El congestionamiento vial tiene repercusiones económicas. Durante 2009 la pérdida de tiempo que experimentaron los ciudadanos se contabilizó en un 2% del Producto Interno Bruto (PIB).
Con ese panorama, Carlos Alvarado, aspirante presidencial del Partido Acción Ciudadana (PAC), y su oponente Fabricio Alvarado, de Restauración Nacional brindan diferentes propuestas. Algunas nuevas, otras que apuestan por el continuismo y unas cuantas más que desempolvaron del pasado.
Una GAM colapsada
Años de mala planificación en infraestructura vial y en desarrollos inmobiliarios y comerciales, aunada a infraestructura vial antigua, explican el estado de la movilidad en la GAM.
En las últimas décadas, la mancha urbana aumentó desmedidamente, sobre todo en las cuatro áreas metropolitanas: San José, Cartago, Alajuela y Heredia.
Otro factor que agrava esta situación es el marcado crecimiento demográfico, en 1984 la población de la GAM era de 1.288.082 y si se compara esta cifra con la del censo del 2011, se puede ver un crecimiento del 76%.
Además, aumentó la cantidad de vehículos que circulan en el país. En el 2007 se contabilizaban 797.902 y al 2016 la cantidad de automotores era de 1.429.928, un aumento del 79%.
A esto se le debe sumar que el transporte público es deficiente y no tiene capacidad para optimizar su funcionalidad. Miles de personas prefieren utilizar su vehículo privado antes que viajar en bus, taxi o tren.
Problema costoso
Las mediciones que se han hecho de la factura que se paga por el caos vial no están actualizadas, sin embargo, los datos evidencian el alto precio que pagan los ciudadanos.
La pérdida de tiempo en congestionamiento vial en el 2005 representaba el 1,9% de la producción y subió ligeramente al 2% en 2009. A esto se agregan las pérdidas netas por choques viales. El valor anual promedio entre 2001-2004 alcanzó el 1,22% del PIB. Para el...
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