El problema que otros desean

Olman SeguraLa poca importancia que por años se le dio a la educación técnica es la razón por la que el país enfrenta ahora un faltante de este tipo de profesionales. Pero lejos de ser un problema, esta alta demanda de personal es una gran oportunidad para que la economía costarricense continúe creciendo, para que nuestra educación técnica e ingenieril sea fortalecida, para que el país se desarrolle, en fin, debe entenderse como el problema que otros muchos países desearían tener y como la ventaja que nosotros no podemos desaprovechar.Por eso, en el Instituto Nacional de Aprendizaje (INA) emprendimos, desde hace dos años, una serie de cambios para lograr ponernos al día con las demandas presentes y futuras del sector productivo nacional.Somos conscientes que si no se dispone del recurso humano calificado, sencillamente la productividad cae y la competitividad del país estará relegada y tremendamente limitada, por eso nuestra meta es graduar al menos 30.000 nuevos técnicos durante los cuatro años de la administración Chinchilla Miranda.Queremos que la educación técnica ocupe el lugar que merece y sirva de base, de apoyo y de plataforma al desarrollo económico del país, tal y como lo han logrado naciones como Alemania, Singapur, Finlandia, Irlanda y Taiwán, que apostaron por la formación técnica de sus ciudadanos desde hace varias décadas.Dichosamente, en la sociedad costarricense hemos empezado a comprender que la educación técnica es una posibilidad tan rentable como otras y que este es el tipo de personal que, mayoritariamente, las empresas demandan, mientras tanto en el INA ejecutamos rápidamente las tareas que se requieren para estar al día.Actualizamos los currículos, según las exigencias del mercado, y ejecutamos millonarias compras para la actualización e incursión de equipo de punta, al ritmo que la Administración Pública lo permite. Al mismo tiempo, mantenemos una estrecha relación con los empleadores a fin de responder a tiempo a sus necesidades de personal. Incluso, coordinamos de previo y de forma coordinada con el Ministerio de Comercio Exterior y con Cinde, para atender las demandas de la potencial Inversión Extranjera Directa (IED).Desde ya trabajamos en áreas que empiezan a despegar y que, sin duda, serán una rica fuente de generación de empleos técnicos y técnicos...

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