ATRÁS QUEDÓ EL LLANTO y el RETIRO

Hundido en la decepción, Johan Venegas lloraba por las noches. No tenía un norte, Santos de Guápiles le cobró su irregularidad y lo mandó para la casa. El 'Puerto' lo rescató pero el futbolista estaba deprimido y no reaccionaba.El manudo valoró el retiro tempranero en medio de las constantes desilusiones y la frustración de no alcanzar el éxito.Hace menos de dos años esta era la realidad del volante que hoy mantiene a la Tricolor con opciones de ganar la Uncaf.'Hubo muchas noches en que se me salían lágrimas y lloraba porque no tenía equipo. En un momento no sabía adónde ir y pensé en retirarme pero me di cuenta que mientras uno honre a Dios todo sale bien', contó.Una arenga repetitiva en el futbolista, quien tomó un nuevo impulso luego de tocar fondo.'Él pensó seriamente en retirarse, se le habló duro para que supiera que tenía condiciones. Cuando llegó al Puerto mentalmente no estaba bien', contó Rónald 'Carraco' Chaves, extécnico chuchequero.Precisamente la mentalidad siempre fue el freno en la carrera de Venegas.Un día podía tener una actuación destacada pero al siguiente partido recaía por culpa de los problemas familiares y personales que le impedían focalizarse en lo futbolístico.En medio de los golpes, Johan se dio cuenta de que...

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