'¿Quién me ayudará a olvidar que estuve preso por ser pobre?'

Para Jorge Alvarado Bonilla, cancelar ¢360.000 en lugar de ¢1.150.000 por gastos de entrada a clases de sus tres hijas es 'una buena noticia' a medias, pues dice que, incluso con rebaja, le es difícil pagar ese monto.

Por eso, el viernes 12 de febrero presentó una apelación ante el Juzgado de Pensiones Alimentarias de San José, para solicitar a los jueces que vuelvan a fundamentar la cifra fijada.

'Estoy satisfecho a medias, porque me lo rebajaron, pero todavía la jueza no quiere dar el brazo a torcer. Ella sabe cuáles son mis posibilidades económicas porque se lo demostré, pero, aun así, me sigue poniendo algo que no puedo pagar', comentó.

Alvarado afirmó que 'la jueza no tiene bases que justifiquen esa cantidad en lo absoluto. Ella cree que lo que uno quiere es no pagar y las cosas no son así. Quiero pagar, pero lo que es necesario'.

Para él, un monto justo sería de ¢300.000; es decir ¢100.000 por cada hija. 'Si ellas llegaran a necesitar algo más para la escuela, haré lo que pueda por comprarlo, pero no creo que eso suceda'.

Acciones. Además de la apelación que presentó, Alvarado contó que demandará al Estado por daños y perjuicios.

La denuncia estará basada, según explicó, en que tuvo que pasar varios días preso por no poder cancelar una cantidad de...

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