El corazón cartago no está acostumbrado a estas emociones

Cartago. Aún la afición celebraba el gol de Mauricio Castillo cuando el drama llegó a la gradería: una aficionada brumosa se desvaneció en medio de la algarabía general del Fello Meza.La situación no pasó del susto pero sí dejó algo claro: el corazón cartago no está acostumbrado a estas emociones.Generaciones y generaciones de cartagineses han pasado por el reducto blanquiazul sin presenciar algo como lo de ayer, una victoria inédita para una espera titánica, 73 años de sequía que le quiebran la fe a cualquiera.Por eso las invasiones de cancha y la celebraciones anticipadas le están permitidas a ellos, porque es difícil contener las primeras emociones, esas que ayer pululaban en cada alma ligada a la empresa brumosa.Fue una noche mágica para un Cartaginés que vive de estos momentos, de ilusión y de espera, de esa fe casi ciega por alcanzar algo que la mayoría de afición ni siquiera ha vivido.Nunca antes el equipo de la Vieja Metrópoli había ganado con un 3-1 el primer partido de una final, ni a Herediano ni a cualquiera otro equipo. Es más, nunca había marcado tres goles.También tuvieron que pasar 76 años para que volvieran a celebrar un triunfo en una serie validera por el título, algo que no pasaba desde aquel 10 de enero de 1937 cuando vencieron al Club Sport La Libertad por la mínima.Entonces, ¿por qué no celebrar?, si son estos detalles los que alimenta el corazón cartago, lo que hoy tiene a los brumosos más cerca que nunca de...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR