Crónica de los mercados: Tres tragos amargos

El rumbo que tomaron los casos de Corporación Yanber, Almacenes Casa Blanca y Sinocem Costa Rica debería servir para que los acreedores de estas empresas, sobre todo bancos, revisen sus políticas para evaluar el riesgo sistémico de los deudores a los que pretenden financiar.

Aunque se trata de tres compañías con actividades productivas muy diferentes, y con problemas de negocio que surgieron en situaciones distintas, todas ellas lograron levantar grandes sumas de dinero en muy poco tiempo, con ayuda de varios bancos públicos y privados, lo que propició que los posteriores atrasos e incumplimientos de pago se propagaran (o amenacen con hacerlo) por todo el sistema financiero.

Retrocedamos a enero del 2016, ocho meses después de que Yanber se declaró en suspensión de pagos. En ese momento, las deudas de la compañíaeran por $56 millones, incluidas 16 entidades financieras y proveedores. Luego, en febrero de este año, conocimos el caso de Casa Blanca, cuyos pasivos llegaban a $61,5 millones con 202 acreedores, entre ellos seis bancos.

El mes pasado, La Nación reveló que las empresas de Juan Carlos Bolaños, relacionadas con la importación de cemento desde China, adeudaban $50 millones a diez entidades, entre bancos, financieras y solidaristas. Algunos de estos créditos ya tienen problemas de pago.

La semana pasada, el Banco...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR