David Ramírez le da otra cara a su rebeldía

La rebeldía bien dirigida puede convertirse en un elemento esencial dentro de cualquier libreto. Cuando un futbolista refleja en la cancha ese atrevimiento y deja atrás los conflictos para dedicarse a jugar, puede darle a su equipo un plus, aún más en duelos cerrados.

David Ramírez parece haber entendido esta realidad, cuando decidió quedarse en la S después de disputar la Copa Oro como titular con la Sele Mayor.

Tres anotaciones en este inicio de campaña, una de ellos anoche frente a Cartaginés, le devuelven la esperanza a un futbolista que aspira, al fin, a consolidarse en el fútbol nacional.

Fue la diagonal hacia adentro de Ramírez la que rompió la retaguardia brumosa, cuando después de un buen centro de Daniel Colindres por izquierda, el atacante metió su cabeza y perforó las redes al minuto 43'.

El tanto del artillero encaminó un partido que pintaba mal para Saprissa, inconstante en ataque y con dificultades para sobrepasar la línea de presión brumosa. Aún con limitaciones, Cartaginés se animó a atacar por lapsos, aprovechando los espacios que dejó el local atrás cuando quiso ir arriba.

El primer gol acabó por romper el cerrojo y, de paso, silenció los chiflidos que se empezaron a escuchar en las tribunas de la Cueva, ante la inconsistencia.

De paso, les permitió a los tibaseños afrontar el segundo periodo con otra actitud, sin tantas presiones y más claridad en el juego de ofensiva. Con Cartaginés obligado a buscar el empate, se liberó Daniel Colindres y aparecieron algunos espacios para Jerry Bengtson, luchador incansable en zona de ataque.

Apenas a los siete minutos de la complementaria, el defensor Julio Cascante se encargó de ponerle la lápida al cotejo, cuando cerró...

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