Editorial El recurrente tema fiscal

El Financiero, como un medio costarricense especializado en economía y finanzas, se siente obligado a editorializar, una vez más, sobre el problema fiscal del país; así lo hicimos en nuestra edición anterior. Consideramos que este es un asunto de vital importancia para el crecimiento, la estabilidad y la equidad. Se trata de un problema recurrente, que se repite una y otra vez de forma cíclica sin solución permanente.

Ha existido en Costa Rica una recurrente demagogia en materia fiscal.

El sistema político -ya sea el antiguo bipartidismo o el actual multipartidismo- ha sido abundante en promesas sin contenido económico. Las campañas electorales han sido pródigas en ofertas, en las reformas a la Constitución Política se han creado derechos y obligaciones de gasto (por ejemplo, el 8 % para la educación pública) y en las leyes se distribuyen ingresos que el Estado no tiene y se asumen compromisos sin financiamiento alguno.

La demagogia fiscal incluye también las promesas de no aumentar los impuestos.

El Estado en forma recurrente ha estado sujeto a intereses particulares. Dos ejemplos sobre este tema. Las organizaciones sindicales del sector público han logrado esquemas de remuneraciones financieramente insostenibles y sin ningún tipo de evaluación de resultados. En materia laboral, la parte débil en la relación entre los sindicatos del sector público y el Estado ha sido este último. El Estado, bajo amenaza de huelgas y bloqueos de vías públicas, ha tenido que ceder ante las 'reivindicaciones' de la burocracia pública.

Según las dos últimas Encuestas de Ingresos y Gastos de los Hogares, el incremento de la desigualdad en las remuneraciones en el país entre 2004 y 2013 se explica parcialmente en el extraordinario aumento de los salarios del sector público.

Otro ejemplo de la preponderancia de los intereses particulares sobre el bien común es el proyecto de ley que se tramita actualmente en la Asamblea Legislativa para usar fondos públicos en la condonación de deudas de un grupo de empresarios turísticos autodenominados 'pequeños empresarios'. También podríamos mencionar los sectores que han estado exonerados en el pago de impuestos.

La política de 'tirar la bola' para el otro lado ha sido usada recurrentemente para evitar la solución del problema fiscal. Los sindicatos le echan la culpa a los empresarios y viceversa. Los gobiernos y la oposición, independientemente de los actores, se han lanzado las culpas del tema fiscal.

Por ejemplo, en la...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR