Eli Feinzaig, fundador Partido Liberal Progresista: 'El Gobierno me ha sorprendido positivamente'
Eli Feinzaig, fundador del Partido Liberal Progresista, afirma que el gobierno del PAC lo ha sorprendido 'positivamente' en el manejo de la situación fiscal y de la huelga de empleados públicos.A pesar de su ADN político, opuesto a los impuestos, Feinzaig considera que el país requiere de la aprobación de la reforma tributaria antes de que termine el 2018 pues, de lo contrario, prevé un escenario peligroso en el ámbito económico.¿Qué le ha parecido el funcionamiento hasta ahora del gobierno de Carlos Alvarado?El Gobierno, tengo que decirlo, a mí me ha sorprendido positivamente. Ha dado más de lo que yo esperaba de un segundo gobierno del PAC.¿En qué lo ha sorprendido positivamente?En el manejo de la huelga. La gente me va a decir: 'Diay pero la huelga lleva 50 días y no se ha resuelto'. Bueno, el hecho de que al Gobierno no le haya agarrado canillera y no se haya dado por vencido en las primeras de tanteo, como hacía el gobierno de Luis Guillermo Solís, que en cualquier manifestación de taxistas, sindicatos, o lo que fuera, no tardaba dos horas en agarrar el pliego de peticiones y le decía: 'Le voy a otorgar todo lo que me pidió y, además, le voy a agregar, porque si me pidió 50 cosas, yo le voy a dar 58'.'El hecho de que el Gobierno se haya mantenido firme, que haya resistido la tentación de un mal arreglo es muy positivo. Que esté planteando esta reforma fiscal, que a mí me parece mala, pero es infinitamente superior a cualquier reforma fiscal que hayan planteado Liberación o la Unidad, o el mismo PAC en el pasado, yo lo veo positivo.'Ojalá, si se aprueba el plan fiscal, uno pueda ver que se le dé continuidad a lo que se ha venido trabajando y a lo que se prometió, como las reformas del Estado y del empleo público'.Usted es liberal, piensa distinto a las personas en el poder, al menos las del PAC. ¿Teme algo acerca de lo que esas personas puedan hacer en adelante desde el Gobierno?Mi gran temor es que por el desgaste político, aprobada la reforma fiscal, que doña Rocío (Aguilar, ministra de Hacienda) reciba una llamada en la que le digan: 'Ya no necesitamos más sus servicios', o que don Rodolfo (Piza, ministro de la Presidencia) reciba una llamada: 'Muchas gracias, pero ya usted jugó'. Los harían pagar el costo político (de la reforma fiscal), la cual puede ser una movida políticamente astuta de parte del PAC, pero para el país sería fatal porque ¿quién va a llenar esos campos? Estatistas, defensores de privilegios y prebendas y no van a...
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