Ferrocarrileros hacen de los viejos vagones de tren su casa

Son las 10 a.m. y la temperatura en San José alcanza los 24 grados Celsius. El Sol calienta el hierro y el acero de unos siete vagones que dan techo a más de 18 trabajadores del ferrocarril, ubicados en la estación al Pacífico, al sur de San José.Ellos trabajan por contrato con el Instituto Costarricense de Ferrocarriles (Incofer) y por provenir de zonas alejadas de la capital, tienen los vagones por casa.Ahí dentro hay televisores, cocinas de gas y, para decorar, uno que otro póster de mujeres.Un tendedero con las prendas recién lavadas por los inquilinos es otro de los símbolos de que aquí vive alguien, lo mismo que unas improvisadas cortinas que guardan las historias que se entretejen.Javier Coto Vega, de 66 años, más conocido como Oveja, es uno de los habitantes de los vagones.Con pantalón corto y camisa sin manga, hace frente el calor mientras cuenta que él es un cartaginés ya pensionado. Aun así sigue trabajando de 'brequero', como se conoce al operario que se encarga de los frenos del tren. Según dice, él aquí le avisa al maquinista que tenga precaución y labora en el buen funcionamiento del ferrocarril, que actualmente da servicio de pasajeros entre San José y varios puntos de provincias cercanas. También ofrece transpote de carga en forma limitada.Resentimiento. Coto Vega es uno de los cerca de 1.700 empleados del...

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