A la Liga le salió barato el bajo rendimiento en primera vuelta
El Torneo de Verano 2017 es benévolo con Alajuelense, porque a pesar de que presenta un rendimiento de apenas el 36,36%, no se encuentra lejos de la zona de clasificación.
Estas fueron 11 jornadas de sufrimiento para la Liga de Benito Floro, pero, aún así, el cuarto lugar, último que da boleto a la segunda ronda, no está fuera de su alcance.
Los manudos están a seis puntos de ese puesto, ocupado ahora por San Carlos, y si ven hacia la cima, se encuentran a ocho unidades de Limón.
En certámenes anteriores, la diferencia del primer lugar con un club que tuviera un rendimiento como el de la Liga fue de hasta 16 puntos, como sucedió en el Invierno 2014.
Claro, otros equipos están en una situación similar y también luchan por un cupo.
El equipo marcha en la novena casilla con 12 puntos, tras un saldo de tres victorias, tres empates y cinco derrotas.
A los rojinegros les costó varios puntos la seguidilla de goles encajados en jugadas de bola muerta, sobre todo por el nuevo estilo de marca en zona implantado por el técnico.
En este momento, el equipo tiene un juego intermitente, porque la tendencia es que inicia con agresividad, luego entra en un lapso en el que pesa la falta de generación de juego y aunque termina atacando, el rival también saca las uñas para cuidar lo que ya logró.
Pero en la Liga no quieren quedar fuera del baile y se tienen la fe de que el viento comenzará a soplar a su favor.
Pese a que tienen 12 puntos de 33 posibles, los rojinegros analizan los números y creen que su panorama no es tan catastrófico, porque sienten aún pueden salvar la temporada.
'Sabemos que tenemos que hacer una segunda vuelta perfecta. Ya los resultados nos tienen que acompañar', dijo el volante José Luis Cordero.
Por su parte, el presidente Fernando Ocampo señaló: 'Lo que pasa es que este campeonato es muy competitivo y las distancias son pocas. Nosotros tenemos que empezar a ganar de nuevo para ir subiendo y meternos en la pelea'.
En la teoría, Alajuelense tiene como ventaja que de los 11 juegos que restan siete los disputará en el Estadio Alejandro Morera Soto.
Sin embargo, a la Liga le cuesta sonreír en su hogar, a pesar de que la afición volvió a llenar las gradas de su estadio, algo que no ocurrió en los torneos más recientes.
Y ese distanciamiento era en parte porque el liguismo está sediento de un cetro que se le negó en los últimos seis torneos.
Repunte. Pero...
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