Madres hallan en redes de cuido alivio para afrontar la pobreza

'La mayor parte del tiempo no tenía qué comer. Mi hijo de 2 años me decía 'tengo hambre', y tenía que responderle que se esperara hasta mañana. La de 15 años me entendía y me contestaba que no iba a comer para que yo lo hiciera, porque en aquel momento estaba embarazada del menor', contó Johana Arias Brenes, empleada doméstica de 35 años, quien vive en Heredia.Ella aprieta fuerte sus dientes. Toma aire, mira hacia los costados, como quien busca una gota de aliento, para luego recordar.Hoy, sin embargo, esta madre soltera, quien vivió en un orfanato hasta sus 15 años y no conoció a su madre, dice que tiene esperanza.Sus hijos, François, de 5 años, y Josua, de 3, reciben a diario un plato de comida. Además, tienen ya educación preescolar.Un subsidio del Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) permite a los niños asistir a la Fundación Sunem, en Heredia centro, que opera dentro del programa de Red de Cuido Infantil, plan estrella del gobierno de Laura Chinchilla.Según el Ministerio de Bienestar Social, el plan ha incorporado en tres años a 9.082 niños de 0 a 7 años de edad, quienes, mientras sus padres trabajan, permanecen bajo el cuido de maestras y con alimentación pagada por el Estado.El propósito del plan es que los padres puedan trabajar o educarse para alejarse de la pobreza.La mayor parte de los menores se han sumado al plan por medio de los Centros de Educación y Nutrición, así como los Centros Infantiles de Atención Integral (Cen-Cinái), algunos nuevos y otros con mejoras.La promesa es beneficiar a 15.000 menores, de los cuales aún faltan 5.900 por cubrir en un año.Con la red de cuido, Brenes, por ejemplo, sale tranquila hacia su trabajo donde gana ¢7.500 al día, que, al menos, le aseguran el alquiler de casa de ¢125.000 al mes.Ahí, en Sunem, Shirley Carranza, de 45 años y vecina de Guararí, halló la posibilidad de estudiar computación y retomar el colegio.Esto ocurre mientras sus hijos Isaac y María Paula, de 5 y 3 años, están al cuido de la Fundación. La niña tiene síndrome de Down.Superación. Geovana Morera Aguilar, de Cartago, tiene 31 años, de los cuales durante 10 fue víctima de violencia doméstica. También en ese tiempo nacieron sus cuatro hijos. 'Aguanté por los niños y porque...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR