Mantequilla o rifles

Carlos Manuel EcheverríaLa caída de la bolsa el 8 de agosto responde más a una sanción a la disfuncionalidad política actual que a la compleja problemática económica.Desde hace tiempo, el sistema político de los EE. UU. no funciona como debiera. Aunque en el fondo los valores de la mayor parte de los norteamericanos tradicionales, los que todavía predominan, tienden a ser los de los republicanos moderados, desde hace varios años los dos partidos no se ponen de acuerdo sobre temas fundamentales, estratégicos.Esto se torna delicadísimo a la luz de la difícil situación que vive el país. Durante años, los norteamericanos se olvidaron de Keynes y, cuando lo resucitaron, lo hicieron 'con venganza'. También se olvidaron de Paul Samuelson y su famoso 'mantequilla o rifles' y es allí donde me atrevo a afirmar que está el verdadero problema. A la sociedad norteamericana, la del sueño del mismo nombre, le gusta la mantequilla, pero también le gustan los rifles o, en todo caso, tiene necesidad de tenerlos y a menudo usarlos. De allí que frecuentemente se involucra en conflictos no totalmente claros.No es posible producir mantequilla y rifles sin límite, y menos con la plata de otros. En el caso de los rifles, lo más barato es no usarlos, excepto para apoderarse por la fuerza de botines en manos extranjeras, a la Gengis Khan o Tamerlain. Es un sistema de apropiación de riqueza que en los últimos lustros no ha sido muy exitoso y no va acorde con los valores de sociedades civilizadas y democráticas. No siempre, además, la mantequilla producida es la adecuada a los requerimientos del progreso sostenido en pos del desarrollo.Con esteroidesOtro tema al que se le pone poca atención es el de la relación entre el capital y el trabajo. La aceleración del cambio tecnológico a...

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