Un ministro de dos mundos

Dos mundos que se alejan, pero que buscan órbitas de reconciliación confluyen en la figura del nuevo ministro de la Presidencia, Carlos Ricardo Benavides: la corriente de los Arias y la de Laura Chinchilla.Con el arismo, este abogado de 42 años se instaló en las primeras filas de la política, primero como vocero del arismo dentro de la fracción del 2002 al 2006, luego hombre de confianza como ministro, reconocido como ficha fiel y obediente de los hermanos Rodrigo y Óscar Arias.Ahora, la presidenta Laura Chinchilla que lo convocó en la cartera de Turismo, le da el recargo de apagafuegos, primero en Deportes y ahora en Presidencia, con el rancho ardiendo: enlazar la Presidencia con el Congreso y una bancada liberacionista claramente dividida, y enfrentar una oposición que es mayoría.Benavides ya fue jefe de su fracción en una Asamblea Legislativa multipartidista entre el 2002 y el 2006. De hecho fue compañero de la Presidenta como diputado.Por lo tanto, ambos se conocen en el propio terreno que ahora Chinchilla le encomendó.Esa experiencia para lidiar con diversas fuerzas políticas y una apariencia de mayor audacia política lo habrían puesto en ventaja frente a su predecesor, Marco Vargas.El Ministro saliente es quizás un hombre muy poco apto para el contexto política actual: ingresó en la política bajo el ala figuerusta (1994-1998) y su experiencia política se desplegó en el mundo bipartidista de los noventas.Aunque Vargas fue figura en la administración Arias (ministro de Coordinación, Economía y de Transportes), pronto tuvo roces con su antecesor en el cargo de Presidencia, Rodrigo Arias, que lo criticó desde su condición de precandidato achacándole 'errores' como el aumento salarial de los diputados.Ante ello, Vargas llegó a acusar a Arias de 'falta de nobleza' y lo criticó por iniciar una temprana carrera electoral que afectaba al Gobierno.¿Se darán la mano?El nombramiento de Benavides sucede mientras la Presidenta pierde terreno en las encuestas de popularidad, y cuando la alianza con el Movimiento Libertario para controlar el Directorio se fracturó, por lo que el PLN necesita reunificar filas.Ante una oposición todavía dispersa, pero que podría empezar a caminar hacia un frente común, unificar al PLN es prioridad para Zapote.En esa dirección, tras un año de no reunirse, Óscar Arias y Chinchilla, tuvieron un encuentro la semana pasada.Sin embargo, por el momento esa unión no ha tenido efectos en el Congreso. La relección de la jefa de la bancada del...

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