¡Rabia saprissista!

Era inevitable que los futbolistas morados salieran calientes del Lito Pérez, no solo por los 36 grados que hicieron hervir la Olla Mágica, sino porque hicieron un partido casi perfecto y al final se les fue el triunfo de las manos.Saprissa dominó el juego a placer, maniató el futbol ofensivo del Puerto durante la mayoría del cotejo, tuvo la posesión de balón y al final un descuido en la zaga le impidió acabar con una racha de 14 años sin ganar en ese estadio.El gesto de cólera de los tibaseños fue evidente cuando terminó el duelo. Rónald González se dirigió al camerino con bravura, mientras Michael Umaña se tomaba el pelo y mostraba un claro gesto de desilusión en su rostro.Y no era para menos. El Monstruo fue muy superior ayer e hizo todo lo necesario para salir con la victoria de suelo porteño, pero al final Roberto Wong aprovechó un pelotazo largo, en la agonía del cotejo, para igualar los carteles con un remate de buena factura.La realidad es que el resultado no fue un reflejo de lo ocurrido en los 90 minutos.El equipo tibaseño puso la pelota al suelo y fue el que llevó los hilos del duelo...

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