Rechazo a vacunas provoca retorno de enfermedades graves

Durante muchos años, el sarampión fue considerado una enfermedad que solo preocupaba a países de muy escasos recursos, incapaces de vacunar a gran parte de la población.

Este 2017, el panorama cambió. Luego de varios años en que grupos antivacunas impulsaron que más padres dejaran de inocular a sus hijos por considerarlo 'peligroso' y causante de autismo -ambas hipótesis descartadas por la evidencia científica-, la enfermedad regresó a países desarrollados de Europa, donde mató a 35 personas.

Además, se registraron al menos dos brotes en EE. UU.

Esta situación es uno de los principales retos en materia de salud con los que se enfrentará el mundo en el 2018, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), que ayer presentó su Resumen anual 2017. Además del sarampión, otras enfermedades fácilmente prevenibles con vacunas, como rubéola y polio, están mostrando casos esporádicos, por lo que la OMS pide actuar ante ese tipo de campañas.

Mal peligroso. El sarampión es una enfermedad muy contagiosa, causada por virus.

Se propaga por contacto mediante gotitas provenientes de la nariz, la boca o la garganta (tos o estornudos) de una persona infectada.

Los síntomas, por lo general, comienzan de 8 a 12 días después de la exposición al virus (periodo de incubación), pero las personas pueden contagiar a otros desde el primer momento en que se exponen al microorganismo. Estos síntomas incluyen erupciones en la piel que causan comezón, tos, fiebre, dolor muscular, conjuntivitis y dolor de garganta.

La enfermedad suele ser leve o moderadamente grave, pero pueden darse complicaciones, como neumonía, diarrea, ceguera y encefalitis.

Las hospitalizaciones alcanzan entre 20% y 25% de los casos...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR