Saprissa: el equipo-pulpería

Jacques Sagot

jacqsagot@gmail.com

Cuando reconstruimos el palmarés de Saprissa durante la era posterior al hexacampeonato, observamos que el cuadro ha perdido la capacidad para revalidar títulos. ¿Tetracampeonatos, tricampeonatos, siquiera bicampeonatos? Imposible o harto infrecuente.

El malestar que esto genera procede de esos seis campeonatos que bañaron de morado la década de los setentas. Los saprissistas que lo vivimos, quedamos por siempre anhelando otra gesta épica de tal magnitud.

El problema es que Saprissa, en lugar de un equipo de fútbol, se ha convertido en una pulpería futbolística. Tan pronto gana un campeonato, corre, movido por no sé qué oscuro móvil autodestructivo ?o por amor a los billetes? a desmantelar el cuadro triunfador. Gana torneos para vender jugadores: esa es su ya bien consolidada política. Una vitrina, un escaparate para los mercachifles del fútbol. Así tuvimos que pagar con el fracaso deportivo la pérdida sensibilísima de Yeltsin Tejeda y Kendall Waston.

Ahora, Saprissa encarama en su chinamo a Christian Bolaños, Ariel Rodríguez y Andrés Imperiale, y los vende al mejor postor. El resultado es que, después de cada victoria, podemos contar con varias temporadas perdidas en reajuste y reconfiguración.

Si a Ariel le hicieron una buena propuesta, era preciso contraproponer algo mejor. Se lo merece. Su súbito despertar en la fase final del campeonato nos deparó cantaradas de goles.

Bolaños fue el carburador...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR