Sub-20 cargó una cruz por sus errores defensivos

Bogotá A Costa Rica se le fue el Mundial Sub-20 de Colombia buscándole la vuelta a solucionar los problemas defensivos que demostró en la competencia.Si bien se recompuso en el partido del martes ante los anfitriones -por fin se fue sin sufrir un tanto en contra en el primer tiempo- dos despistes en plena recta final le permitieron una espectacular voltereta a los cafeteros.La evidente fragilidad de la última línea tica, sobre todo por el centro, comprometió el paso del equipo, opacó las cosas buenas que demostró del medio hacia adelante, obligó a cambios en la alineación para todos los partidos (algo inaudito) y dejó dos grandes damnificados individuales: el zaguero central Ariel Soto y el guardameta Mauricio Vargas.El primero perdió la titularidad y la capitanía tras el desastroso juego que hizo ante los españoles (victoria 4-1 de los ibéricos). Si bien regresó ante los colombianos, no recuperó la cinta de capitán.Quienes cubrieron esa demarcación, Francisco Calvo y Keyner Brown, no dieron la talla: Calvo estuvo flojo y cometió un autogol; Brown no le agarró el hilo al juego de Ecuador (paliza 3-0 de los suramericanos) y salió.Por su parte Vargas, titular en todo el proceso, terminó en el banco en un juego tan decisivo, lo que habla a las claras de que algo se quebró durante la competencia.Aarón Cruz, su suplente...

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